Aprender un idioma nuevo es un proceso que requiere mucha motivación y compromiso. Que este aprendizaje sea más o menos complicado depende del grado de implicación del alumno pero sobre todo de cuál es su lengua materna. En base a eso se puede determinar cuáles son los idiomas más fáciles de aprender para él.
Sin embargo las características del propio idioma también influyen en lo costoso o no que pueda ser aprenderlo. Las similitudes con nuestro propio idioma, un vocabulario sencillo, las formas verbales o la cantidad de hablantes son determinantes para que podamos asimilar mejor la nueva lengua. Te mostramos cuales son en líneas generales los idiomas más fáciles de aprender.
Inglés. Se considera el idioma más fácil por una simple razón, es el idioma más hablado del mundo. Por lo tanto, cuando estamos en el proceso de aprenderlo nos resulta muchísimo más sencillo ponerlo en práctica. Más de 2 mil millones de personas lo hablan y está presente de una u otra forma en prácticamente todos los idiomas del mundo. Tiene un vocabulario sencillo con palabras cortas mayormente, solo una variante en la conjugación de los verbos y sin géneros.
Afrikaans. Es el idioma utilizado en Sudáfrica y Namibia y es el resultado de mezclar 5 idiomas distintos: holandés, bantú, khoisan, portugués y malayo. Esta mezcla ha hecho que sobre todo la gramática se simplifique al máximo y que los verbos, los pronombres o el género no se conjuguen. La construcción del lenguaje es muy sencilla por lo tanto aprender a usarlo resulta mucho más fácil, sobre todo para los que ya hablan alguno de los idiomas de los que se componen.
Español. Es el idioma más fácil dentro de las lenguas romances. Aunque la conjugación verbal sí es algo complicada, que sea un idioma que se habla y se escribe de igual modo simplifica mucho su comprensión y aprendizaje. Además es uno de los idiomas más extendidos del mundo por lo que, como ocurría con el inglés, practicarlo es más fácil.
Swahili. Es uno de los idiomas más extendido en África y su composición está influenciada por el inglés, el francés, el alemán y el portugués, resultado de las antiguas colonizaciones que vivió el continente. Por esto su comprensión para el extranjero que hable alguno de sus idiomas base es más fácil. Utiliza un sistema de raíces y afijos para expresar los tiempos verbales, eliminando las conjugaciones.
Italiano. Muy similar a la del español y otras lenguas romance pero con menos formas verbales irregulares, la gramática del italiano resulta sencilla y de fácil comprensión.
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